Apenas una hora y cuarto duró el sueño copero de Valeriano Allés Menorca (0-3) en el partido que abría esta nueva edición –la XXXV–de la Copa de la Reina, ayer tarde en Monforte de Lemos. Las jugadoras de Adrián Fiorenza se vieron superadas en todo momento por el potencial y por el hambre del Murcia 2005 con ganas de reivindicarse, tras los numerosos problemas extradeportivos que ha vivido en la presente campaña lo que ha marcado su irregularidad aunque ahora con el equipo al completo, vuelve a ser el favorito a la Copa y también a la Liga.
Para muchos una final anticipada, no en vano Murcia 2005 y Valeriano Allés Menorca son el vigente campeón y subcampeón de la Copa de la Reina, el encuentro de cuartos entre murcianas y menorquinas respondió a las expectativas creadas. Y es que el conjunto entrenado por Hilarión González no es el mismo que hace unos meses presentaba a juveniles en sus alineaciones. Una vez resueltos los problemas con sus extranjeras, el Murcia 2005 acudió a Monforte de Lemos con todo su arsenal, es decir un equipo temible.
Arrancó el duelo con mucha igualdad, con ambas escuadras muy concentradas y tanteando recelosas a su oponente. Bien en la rotación y en el bloqueo, con Daniela Patiño muy efectiva, las baleares aguantaron las acometidas de las cañoneras murcianas hasta el 6-7. A partir de entonces la primera manga se rompió. Murcia 2005 sacó todas sus bazas ofensivas a relucir para endosar un parcial de 1-7 que prácticamente sentenciaba el set (7-14). Aún así, Adrián Fiorenza llamó a filas a sus discípulas y les ordenó una mayor intensidad en labores defensivas, arenga que surtió efecto ya que Valeriano pasó del 11-19 al esperanzador 15-21. Pero era demasiado tarde. Las rojillas reaccionaron cuando las murcianas tenían el set en el bote. Romina Lamas estaba espectacular en el servicio y Ana Ibis completaba a la hispano-argentina con un trabajo excepcional en la red. A pesar del parcial favorable de 5-4 para las baleares, el cuadro de Hilarión González se adjudicaba la manga inaugural por 20-25 y era el que daba primero.
De nuevo Murcia 2005 tomó madrugadoras rentas en los albores del segundo parcial (4-8, 4-10), obligando de nuevo al argentino Adrián Fiorenza a solicitar tiempo muerto a la mesa. Valeriano continuaba estrellándose una vez tras otra en el bloqueo de Ana Ibis y Visser, que causaba estragos (6-16). Las menorquinas no daban sensación de peligro, sólo pequeños destellos de la venezolana Yoraxi Meleán desubicando al bloqueo murciano permitían a Janine Sandell rematar la faena en la red. Destacar también el regular trabajo de Elena Esteban, una de las mejores de Valeriano en la tarde de ayer.
Con Priscila Rivera efectiva en el remate, el tanteador se disparó hasta el 11-21. Momento en el que las murcianas bajaron el pistón, y al ralentí se hicieron con el set (17-25).
Con el Valeriano Allés al borde del abismo se inició el tercer set. Las rojillas, no obstante, no dieron su brazo a torcer fácilmente. Tras un arranque dubitativo, con un parcial de 5-10 para las murcianas, despertaron de su letargo las de Fiorenza para conseguir un 10-3 y ponerse en franquicia en el tanteador (15-13). A partir de ese momento se vio un equipo aguerrido y agresivo, que basa todo su potencial en el conjunto y en la inspiración en el remate de su jugadora estrella: la británica Sandell. El duelo se igualó, con alternativas constantes en el luminoso, encaminándose hacia un final de infarto. Pero Priscila apretó y el choque murió en 21-25.