Un error del colegiado destrozó lo que iba a ser un bonito derbi juvenil en la Liga Nacional. A los 15 minutos Dalmedo encaró a Rubén, portero del Menorca, que le sacó límpiamente el balón en una gran parada, pero el colegiado decretó que había sido penalti y expulsión, para sorpresa de todos. A partir de ahí el Penya Ciutadella estuvo cómodo sobre el terreno de juego y en el tramo final sentenció con dos goles.
El partido arrancó muy atractivo para la gran cantidad de aficionados que se acercaron hasta el Estadi Maonès. Barro tuvo un uno contra uno con Moll que no supo resolver antes de que llegara la jugada polémica. Derribo inexistente a Dalmedo, que se encargó de marcar el penalti. El Menorca, con uno menos y sin Lluís Vidal en el banquillo ya que fue expulsado por protestar, tuvo el empate a los pocos minutos cuando Fabià no acertó a marcar un balón suelto que le llegó aunque estaba un poco escorado.
El Penya Ciutadella supo frenar las acometidas del Menorca, que buscó el empate con ataques constantes lo que propició que en una contra el Penya Ciutadella sentenciara por mediación de Barrera, en el minuto 82. Tres minutos más tarde Sergio hizo el definitivo 0-3.