Puntos inverosímiles, pelotas a una velocidad endiablada, un ritmo de juego frenético y los cuatro mejores palistas del mundo sobre la pista. Esto es lo que les aguarda a los aficionados que se den cita mañana en la sala multifuncional de Ciutadella, en el recinto levantado para la ocasión, con capacidad para más de 300 espectadores, en el partido de exhibición que disputarán Juan Martín Díaz y Fernando Belasteguin, número uno del ránking, contra Juan Mieres y Pablo Lima, número dos.
El encuentro, al mejor de tres sets, arrancará a las 21 horas y el precio de las entradas es de 18 (anticipada) o 20 euros (en taquilla), mientras que los socios del Club Pádel Ciutadella, entidad organizadora del evento, con la colaboración del Ayuntamiento, podrán beneficiarse de un descuento de tres euros.
Para uno de los protagonistas, Belasteguin, será la segunda ocasión que visite la Isla y afronta el partido como un test antes de iniciar su participación, la próxima semana, en el Pádel Pro Tour que se disputará en Palma. "Me han pasado fotos de como ha quedado la pista y es espectacular. Nos lo tomamos como un partido de entrenamiento serio en el que se jugará a la velocidad de un partido normal pero más sueltos y sin la presión de la competición, por lo que habrá espectáculo".
El jugador argentino, que suma ya diez años junto a su pareja en lo más alto de este deporte, apunta que en este tipo de eventos "la gente suele sorprenderse mucho del pádel profesional y al permitirte estar cerca de la pista, les espera un espectáculo que no se imaginan".
En el bando rival, Juan Mieres, señala en las horas previas que "estamos con muchas ganas, llevamos dos semanas sin competición pero estamos entrenando intensivo y jugar contra los números uno es siempre una motivación extra y, en Menorca, va a ser un espectáculo muy bueno".
El también argentino, está convencido de que será "un partido muy divertido, en el que no iremos al cien por cien pero habrá mucho espectáculo y puntos muy divertidos, la gente verá un partido con mucha intensidad y golpes imposibles".
A pesar de conocerse a la perfección y enfrentarse de forma constante durante el año, a buen seguro que mañana no defraudarán a nadie en el mejor partido de pádel que puede verse hoy por hoy.