«La realidad es que la prueba de los 200 metros del último día me salió bien pero estaba muy nervioso; soy novato en esto y fue una experiencia totalmente nueva». Eran palabras ayer del nadador adaptado de Fornells, Martí Riera, tras completar su segundo y último día en el Campeonato de España, que suponía su debut oficial en competición en una piscina de 50 metros. Riera logró bajar cuatro segundos su marca personal anterior. «Me fallaron los nervios pero también tuve la sensación que puedo mejorar mucho y si me ponen en mi categoría –en la S5 en la que creemos que debería estar– puedo dar bastante guerra. En S7, complicado».
Además, las condiciones que impone la covid-19 complicaron aún más todo a Riera. «Entre gente, mascarilla, saber todo el tiempo que competía con los olímpicos y demás me puse nervioso, me faltó aire, acostumbrado a nadar en el mar», decía para «Es Diari», además de la diferencia de distancia. «Aquí en tres minutos se hace todo y debo acostumbrarme. En piscina 50 era la primera vez que nadaba y es totalmente diferente», advertía, eso sí, «contento de la experiencia. Espero tener una categoría lógica y poder dar mucha batalla».