Llega el torneo más emocional y sentido para la palista de Alaior, Gemma Triay. Este jueves la menorquina saltará a la pista central del Pavelló Menorca para iniciar su periplo en el Estrella Damm Menorca Open, una cita marcada en rojo para Triay. Y también este año para su pareja, Marta Ortega, que tras convertirse en 2019 en la número uno más joven en la historia del pádel, ahora lo busca junto a Triay. Ortega tocó el techo con sólo 22 años, coincidiendo con el final de su carrera universitaria de Medicina. Ahora, cuatro años después, la madrileña sigue en la élite y está a punto de vivir nuevas sensaciones en Menorca, como local, al lado de Triay.
Sensaciones en la previa
A apenas dos días de arrancar competición en el Pavelló Menorca junto a la palista alaiorenca, Ortega habló este mismo martes y de camino a la Isla con «Es Diari». Una cita de Menorca, «para la que teníamos muchas ganas de que llegase, tanto Gemma como yo personalmente, ya que jugar en casa de mi actual compañera es un subidón, muchísima emoción y personalmente, va a ser para mí la primera vez con el público a favor en la Isla», manifestaba la madrileña.
Abundaba ‘Martita', que es como se la conoce en el mundo del pádel, que este certamen del 2023 del Estrella Damm Menorca Open no es un torneo más para la pareja española. «Tengo muchas ganas de sentir el calor de los menorquines, tras tenerlos en contra siempre. Menorca quiere mucho a Gemma y me ilusiona vivirlo con ella, como Gemma en Madrid conmigo», proseguía, Ortega.
«Siempre me ha gustado el torneo de Menorca, mi familia viene porque le encanta la Isla desde siempre. Personalmente, pádel aparte, me gusta alguna tarde tras jugar torneo irme a pasear por Binibèquer, un ‘pueblecito' que me maravilla», señalaba. «Me encantaría venir en verano a Menorca, aprovechar las calas a través del mar. Me encanta la tranquilidad de la Isla, miro al mar y se me pasan todos los males», sostenía, entre risas.
Y es que poder disputar el Estrella Damm Menorca Open como compañera de la jugadora más querida en la Isla del World Padel Tour no se vive cada día. «Me apetece jugar como local aunque estará este punto de querer hacerlo bien ante nuestra gente. Me motiva tanta gente apoyándote y tengo muchas ganas. Sería precioso ganar en casa de Gemma y daré todo de mí», avisaba, llegando a la Isla, «tras una gran semana de entrenamientos y toca hacerlo bien cuando toque. Hay que estar centradas, sonreír y me encantaría aportar mi grano de arena en su regalo y celebrar a diario el triunfo con su gente. En Madrid faltó la guinda y sería bonito acabarlo bien el domingo». Una Ortega que vaticina, «un Pavelló Menorca a reventar como siempre. Nos ilusiona mucho jugar de nuevo en España. Muchos días de gran pádel preveo».