Àlex Pella ya es oficialmente el más rápido en dar la vuelta a las 70 millas náuticas de Menorca. El experimentado navegante barcelonés, que en invierno de 2025 tratará de lograr el récord de la vuelta al mundo hacia el oeste contra vientos y corrientes con su Maxicat Victoria, paró el cronómetro en 9:32:18, al aprovechar una ventana de viento que se abrió este miércoles.
El ‘Re70 Menorca', que cuenta con el patrocinio de la Fundación Fomento del Turismo de Menorca y la colaboración del Ayuntamiento de Mahón, es la primera de las paradas del ‘Desafío Victoria' rumbo a su objetivo de hacerse con el Trofeo Oceánico Elcano, que supone dar la vuelta al mundo, dirección Oeste, tal y como hizo el marino guipuzcoano.
Pella y su tripulación llegaron a Menorca el martes al mediodía y el miércoles presentaron el reto en un acto que contó con la presencia del presidente del Consell, Adolfo Vilafranca, el alcalde de Mahón, Héctor Pons, además del presidente del Club Marítimo de Mahón, Basilio Ferrer. Poco después, los navegantes se echaron a la mar en busca de fijar ese tiempo que, a partir de ahora, será la referencia a batir en el ‘RE70 Menorca', el desafío que ha lanzado el Club Marítimo de Mahón al mundo de la vela.
Las condiciones que tuvo Pella para dar la vuelta fueron muy cambiantes, con vientos en el norte que le permitieron llegar hasta los 24 nudos, mientras que en el sur sufrió algunas encalmadas en Ciutadella, Cala Galdana, Son Bou y en la Illa del Aire que hicieron que el tiempo final se alargara. El equipo tiene intención de volver a salir a rebajar la marca este mismo viernes.
«Estamos muy contentos de haber podido completar la vuelta a Menorca, como se suele decir, nos venimos arriba porque el parte era muy malo, quisimos salir para tomar la línea y probarnos, vimos que las condiciones eran buenas, que el barco empezó a correr y seguimos sabiendo que tras Punta Nati iba a ser más complicado. Completamos prácticamente media vuelta a la Isla en 2 horas y luego las condiciones fueron bajando, con calma y navegando a ceñida, hasta quedarnos colgados», explica Alex Pella.