El Avarca de Menorca agudizó ayer su peor momento de la temporada y cayó en Ciutadella ante el UCAM Murcia, un rival directo en la lucha por la tercera plaza, q ue queda ya demasiado lejana máxime tras verse abocado a la quinta tras esta séptima derrota en 16 partidos. Sensaciones dispares en un mismo encuentro. Las de Ciutadella tuvieron un juego aceptable en los sets ganados y carencias mentales en los perdidos. No dejó una buena huella y deberá reponerse de inmediato porque los perseguidores pisan cada vez más fuerte.
Le costó al Avarca entrar en el partido. En un Pavelló frío (la afluencia de aficionados fue muy discreta), el Murcia mucho más sereno, se encontró cómodo. La mala recepción del grupo de Llorens, junto con errores poco habituales, colocó al rival 4-6, que Pérez redujo con dos remates (7-8). La deficiente defensa dejaba sin ataque al Avarca, el bloqueo no funcionaba y el buen trabajo defensivo murciano contribuía al desacierto del Avarca. Las sensaciones no eran nada buenas (10-13).
El Murcia consiguió parar el ataque local, pero con el servicio de Cano el equipo colocó un parcial de 8-2 que le puso por delante (18-15) y afectó a su rival. Pérez aprovechó dos malas recepciones del Murcia y los bloqueos de Cano/Gómez, además de un remate de ésta última, poco participativa hasta ese momento, sellaron el primer parcial por un 25-19 que no se ajustaba a su inicio.
La gran resistencia ofrecida por el Murcia en el primer set, siguió y aumentó si cabe en el segundo. No se vino abajo tras perder parcial bien jugado, mientras el Avarca mostró su cara más pobre. Poca fluidez, falta de entendimiento y sin soluciones fiables. Tras el empate a 6 el equipo fue de mal en peor. Bep Llorens vio cartulina amarilla por protestas y sus jugadoras recibieron un severo correctivo (15-25). Solo Pérez se salvó del desastre general.
De nuevo igualdad en el inicio del tercer parcial (4-4), pero con la sensación de que el Murcia jugaba más suelto y el Avarca más presionado. Brun tampoco tenía su mejor día y el bloqueo tampoco aparecía con eficacia. Por suerte Ana Pérez estuvo al rescate (8-5). Ahora la tensión en los banquillos se trasladó al otro lado y el técnico, Collin, también obtuvo cartulina amarilla. Un zurdazo de Brun, otro gran remate de Gómez y un súper bloqueo de Cano aumentaron la ventaja para el Avarca (16-8) camino de anotarse su segundo set. La supo mantener hasta el final gracias, en parte, a Pérez, de nuevo decisiva en momentos precisos. Dos sets a uno y mejores sensaciones.
Bajó la intensidad el Murcia en el cuarto parcial y lo aprovechó el Avarca (8-5). Se le vio más cómodo y convencido, pero la renta mínima se esfumó y tras el 12-8 el Murcia empató a 13. Continuaron las igualadas a 16, 18 y 20, pero con 20-22 Llorens paró el partido. El Avarca se jugaba mucho. Entró Esther Marqués para reconducir el rumbo pero el Avarca ya estaba a la deriva. 21-25 y el partido iba al desempate donde se consumó el lamentable naufragio.
El Avarca realizó uno de los peores sets de su historia (4-15) y cayó ante un Murcia más acertado y tranquilo. Decepción de las grandes en el Pavelló.