Que el certamen Internacional de Bellas Artes de Chelsea, en Nueva York, llame a la puerta de un artista ya es sinónimo de éxito. Especialmente porque de ello se encarga uno de los críticos más reconocidos de la Gran Manzana, el comisario Carlo McCormick, quien este año ha puesto el ojo en tres artistas españoles, uno de ellos el menorquín Joan Taltavull Zapata. Gracias a ello, su obra cuelga a partir de hoy en las paredes de la Agora Gallery.
Hijo de madre catalana y padre menorquín , Taltavull (Barcelona, 1988) nos atiende desde Londres, una ciudad en la que vive desde hace diez meses y en la que dice tener las sensación de que «todo es posible». Reconoce que en el mundo del arte «no es fácil arrancar» pero sostiene que cuando apuestas por algo «si trabajas exhaustivamente en ello y aguantas, en algún momento saldrá».
Sin duda, su selección para exhibir en una de las capitales del arte mundial supone un gran impulso.
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