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Iosune Arriarán y Jordi Viola ganan los premios ‘Illa de Menorca'

«Es Diari» entrega un año más sus galardones literarios de narración corta y poesía

Foto de familia: organizadores y ganadores del certamen, junto a los artistas que actuaron este viernes en Es Mercadal | Gemma Andreu

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A las puertas de cumplir el próximo años sus primeros 30 años de historia, los premios literarios Illa de Menorca, organizados por «Es Diari», dieron este viernes un paso más haciendo más grande un palmarés que con la edición de 2022 suma cinco nuevos autores. Sus nombres fueron desvelados en el Centre de Convencions des Mercadal, donde se procedió a la lectura de las actas de los galardones que se entregan, el veterano de narración corta y el de poesía, que viene cogiendo impulso desde hace nueve años.

En la categoría de relato, el premio ha recaído esta edición en Jordi Viola Giner, el autor de la historia titulada «El joven de la secuoya». Una narración que tendrá como recompensa, además de su edición en el volumen recopilatorio conmemorativo del certamen, un premio en metálico de 800 euros.

El jurado, que este año ha estado integrado por Pau Faner, Fàtima Anglada, Carme Cloquells, Diego Dubón, Inma Pitaluga, Miquel Àngel Limón, Josep Pons Fraga y Lluís Vergés (secretario), destacó sobre la obra de Viola «su calidad formal y narrativa», así como su «inspiradora defensa de la naturaleza y los árboles».

Para la entrega del segundo premio, el jurado lo tuvo mucho más complicado. Hecho por el que decidieron que se concediera ex aequo. Un reconocimiento que se repartieron Lina Pons Massanet y Carlota Fluxá Van Delzen, autoras respectivamente de «Els ulls que ja no em veuen» y «Això és un poble».

Del relato de Massanet el jurado valoró su condición como «un potente y bello relato» sobre el ataque turco a Ciutadella en el siglo XVI «que nos recuerda que desgraciadamente la violencia bélica atraviesa todas las épocas», apuntaron los calificadores en el acta del premio. De la historia escrita por Fluxá destacaron que se trata de una narración «divertida y realista» que tiene como protagonistas anónimos a personajes de Maó. Las autoras ganaron un premio de 300 euros cada una, recibiendo parte de la dotación prevista para el galardón destinado a un autor menor de 25 años, que este año ha quedado desierto.

El certamen de relato breve contó este año con 48 originales, de los cuales un jurado preseleccionador escogió trece. Entre estos últimos, se acordó elegir las obras de seis finalistas para que aparezcan en el libro recopilatorio, y que están firmadas por Carles Mercadal i Victory, Gràcia Carreras Victory, Carlos Minuchin Vilafranca, Eulàlia Brondo Petrus, Aurora Herráiz Águila y Maria Luisa López Cortiñas.

En el apartado de poesía concurrieron a concurso 21 obras, entre las cuales solo cuatro llegaron a la fase final. Factor este que explica, tal y como se recoge en el acta, «que el nivel general no fue el esperado». La deliberación del jurado concluyó con la decisión de otorgar el primer premio a la obra «Entre cínics i porucs, de Iosune Arrariarán (600 euros) y «Caragols», de Miquel Àngel Adrover Perelló (300 euros). Ambas composiciones también formarán parte del libro recopilatorio, que se editará antes de final de año.

Durante su intervención en el acto, el editor del MENORCA, Josep Pons Fraga, en representación de la entidad organizadora, recordó que esta nueva convocatoria del premio ha sido posible gracias al apoyo económico recibido por parte del departamento de Cultura del Consell insular. Una ayuda que colabora a promover «la expresión y la publicación de las inquietudes de esta isla de escritores y poetas menorquines».

En ese sentido, Pons Fraga recalcó que esta es una isla «talayótica, gastronómica, emprendedora y también literaria, con una extraordinaria capacidad para la narración y la poesía».

El conseller de Cultura, Miquel Àngel Maria, se encargó de cerrar un acto durante el que aprovechó para dar las gracias a todos los que han participado en el certamen «por continuar dando vida a esta cita literaria que cada año nos invita a la aventura de crear y escribir para explicar una historia, o puede ser para soñar, cobijarse, exorcizar, pero en todos los casos para compartir».

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