Tanto el PSOE como Més per Menorca han coincidido en valorar el pacto balear entre PP y Vox, que contempla la entrada del partido de Abascal en el gobierno Consell, como una cesión a Vox, en la que el PP, desde Mallorca, ha usado el Consell de Menorca para que el PP pueda poder formar un ejecutivo en solitario en el Govern.
El PSOE critica que se haya usado el Consell como «moneda de cambio» y lamenta que el PP haya «entregando a Vox» la administración insular para poder gobernar en minoría en el Ejecutivo autonómico. Por su parte, la valoración de Més per Menorca va en este mismo sentido, al considerar que «se ha vendido el Consell de Menorca a la ultraderecha» y lamenta que el acuerdo se haya gestado en Mallorca, «despreciando la soberanía de los consells».
Ambos partidos han mostrado jueves su «profunda preocupación y rechazo» ante los pactos conseguidos entre el PP y Vox en las instituciones de Balears que, según los socialistas «representan una atentado a la defensa de los valores democráticos, la igualdad y los derechos fundamentales de los ciudadanos». Més califica el acuerdo de «escandaloso» y advierte que «pone en peligro» los derechos civiles logrados.
«Los socialistas hemos defendido siempre que el Consell es la institución de referencia de los menorquines, y nos indigna que el PP de Menorca no lo haya defendido ante el mercadeo de Marga Prohens», han subrayado el PSOE a través de un comunicado, añadiendo que «es preocupante que el PP asuma con tanta facilidad el ideario de Vox y venda sillas por valores».
El partido considera que los acuerdos entre el PP y Vox son incompatibles con los avances en derechos y de convivencia que tendrían que prevalecer en las instituciones de Balears. En esta línea, han considerado que estos pactos «no solo comprometen la estabilidad política, sino que además refuerzan posturas y discursos de extrema derecha que atentan contra los principios de igualdad, diversidad y respeto a los derechos humanos».
Los socialistas han indicado que resulta «especialmente alarmante» la participación de Vox en la toma de decisiones y la influencia que pueden ejercer sobre políticas públicas en temas capitales, que afectan la sociedad en general, como los derechos LGTB+, la igualdad de género, la protección del medio ambiente y el acceso a la vivienda. También creen que ponen en peligro el modelo de Menorca defendiendo más turismo, más infraestructuras y un desdoblamiento de la carretera.
«Es lamentable que el PP a nivel insular y autonómico haya optado por aliarse con una formación política que fomenta posturas contrarias a los valores democráticos y que ha mostrado una preocupante falta de compromiso con los derechos fundamentales de las personas», han apuntando antes de sentenciar que «Baleares merece una representación política responsable y comprometida con el bienestar común, no acuerdos que ponen en riesgo los avances conseguidos en materia de derechos y libertades y que suponen un retroceso».
El candidato de Més per Menorca, Josep Juaneda afirma que es «lamentable» que Dolfo Vilafranca «no quiera ser presidente de todos los menorquines «sino un simple delegado de Marga Prohens». El portavoz de la formación en la institución insular, Josep Juaneda, ha destacado que la primera víctima de será la Ley Menorca Reserva de Biosfera, es decir, «que la conjunción del PP con la ultraderecha solo tiene como objetivo destruir la Menorca que se ha querido preservar».
Pues vaya novedad. Desde siempre Menorca se dirige desde Mallorca y en función de los intereses de los distintos partidos políticos y no de los intereses de los menorquines. Siempre he pensado que lo primero que dicen a los políticos menorquines cuando llegan a Palma es que si quieren seguir "pisando moqueta" debern ver, oír y callar. De otra forma no se entiende que haya problemas enquistados desde tiempos inmemoriales sin que nadie aporte ninguna solución (transporte aéreo, conectividad, doble insularidad, etc)