Como hace cuatro semanas, Susana Mora compareció para realizar declaraciones de valoración en un ambiente de jolgorio y sonora satisfacción. Muchos aplausos entre los afiliados socialistas que siguieron la noche electoral desde la sede del Cós de Gràcia de Maó. Después de unos cuantos gritos de «presidenta, presidenta», Mora afirmó que «Menorca lo ha vuelto a hacer, ha vuelto a salir a la calle para decir que quiere seguir avanzando por la izquierda y que quiere que el PSOE lidere las políticas de progreso de los próximos cuatro años».
Mora destacó el hecho que «el PSOE se consolide como la fuerza de izquierdas más votada», y la posibilidad abierta todavía a aquellas horas de ser la primera fuerza de la Isla, una opción que calificó como «histórica» pero que finalmente no se produjo. La presidenta del Consell, con muchas opciones de volver a serlo, valoró de forma positiva que la sociedad menorquina haya vuelto a manifestar que «somos una sociedad plural, diversa, feminista, respetuosa que no permitirá que nadie juegue con nuestros derechos». Del mismo modo, destacó los buenos resultados obtenidos tanto en Europa como en el Parlament y en las elecciones municipales «recuperando alcaldías importantísimas, tenemos el Ayuntamiento de Maó, como Sant Lluís y Es Castell, que junto a Es Mercadal nos otorgan cuatro alcaldías». Atribuyó parte de este éxito «al trabajo de un equipo magnífico que se ha dejado la piel para explicar nuestro proyecto».
Por su parte, Marc Pons, número uno de la lista al Parlament, afirmó que el buen resultado de ayer «ha sido el fruto de cuatro años intensos de gobierno autonómico, de gestión, de políticas progresistas, valientes, que la gente ha sabido entender, en Balears y en Menorca».