Miles de alumnos menorquines celebraron ayer el Día de la No Violencia y la Paz, una jornada durante la cual los libros y lápices quedaron aparcados y se llevaron a cabo diversos actos festivos en los centros educativos.
Maestros y estudiantes participaron activamente en la celebración con el objetivo de hacer un llamamiento en favor de la concordia y la paz a nivel mundial, así como recordar y mostrar su apoyo a todas aquellas personas que, todavía hoy, son víctimas de la violencia y la explotación.
Asimismo, los alumnos tuvieron la oportunidad de mostrar a sus compañeros el trabajo realizado durante las últimas semanas con motivo del Día de la No Violencia y la Paz. A través de dibujos, collages y pancartas, con inscripciones como "Paz en todo el mundo", "Queremos paz" o "No más guerras", los estudiantes manifestaron su deseo de que la violencia llegue a su fin y se comprometieron a aportar su granito de arena para que el mundo sea, cada vez más, un poco mejor.
Los alumnos de la Isla volverán el lunes de nuevo a las aulas habituales, pero lo harán, eso sí, más concienciados y agradecidos que nunca.