Satisfacción moderada tras el cierre de la Mostra Nàutica de Ciutadella. La jornada de ayer registró una buena afluencia de público, si bien no evitó que en general, la concurrencia fuera menor que en la anterior edición del certamen, celebrado en la plaza de Es Born. Eso sí, pasó menos gente, pero más interesada. Así lo asegura el presidente de ASMEN, Justo Saura, quien afirma que "quien venía sabía para qué lo hacía". La nueva ubicación al lado de la estación marítima ha ejercido de filtro. Ha reducido el número de visitantes, pero los ha seleccionado: quien iba a la Mostra era porque quería ir, no porque se la encontraba en medio de la calle. Por eso, los expositores acaban, según Saura, "contentos y con ánimos de reforzar este certamen". Las tareas de refuerzo deben empezar, según el presidente de ASMEN, por promocionar más y mejor la Mostra. Saura asegura que "más allá de Ciutadella, la noticia de la Mostra ha llegado poco, y no se ha hecho una promoción adecuada". Así, apuesta por realizar una campaña específica de promoción y divulgación para la próxima edición de la Mostra, para la que pide también que se puedan vehicular ayudas para aquellas empresas que procedan de la otra punta de la Isla y tienen que soportar elevados costes de transporte para participar en la Mostra. "Con más ayudas podríamos aumentar la participación de expositores, y esto al final reforzaría el evento", concluye.
Siempre en Ciutadella
En este sentido, el sábado algunos expositores aseguraron a este periódico que una de las posibilidades para reducir estos costes de transporte, o como mínimo repartirlos, sería alternar la sede de la Mostra entre Ciutadella y Maó. Esta propuesta, asegura Justo Saura, no figura en los planes de ASMEN. "Las ferias deben coger nombre, potenciarse y reforzarse en una sede. Hay que trabajar para que la gente la conozca e incluso más, espere su llegada cada vez que se tenga que celebrar", comenta el presidente.
Más amarres
Otra de las mejoras a introducir en la Mostra sería disponer de un mayor espacio en el mar, es decir, más puntos de amarre para poder exponer las embarcaciones en su estado natural, navegando. Ahora, toca reflexionar sobre estas propuestas y trabajar ya en una nueva edición de la Mostra, después de la incertidumbre que se generó este año sobre la celebración o no de un evento que ha cambiado de ubicación, pero que tiene una clara vocación de continuidad y crecimiento.