A pesar de que en un primer momento no estaban dispuestos a dar su brazo a torcer, los 23 trabajadores fijos de Edificaciones Ramos aceptarán finalmente el Expediente de Regulación de Empleo para el cierre total de la empresa constructora presentado recientemente ante la Conselleria de Trabajo del Govern balear.
El objetivo es no retrasar más de lo necesario un proceso que "puede alargarse demasiado", según han señalado a este diario fuentes cercanas a los trabajadores. "Los operarios ya no pueden esperar más, necesitan que entre dinero en sus casas", han reiterado.
En este sentido, han puntualizado que los trabajadores no han cobrado las nóminas del pasado mes de septiembre y se prevé que la empresa tampoco pueda hacer frente a los pagos del mes de octubre. Al parecer, el propietario de Edificaciones Ramos no dispone de liquidez pero sí de propiedades aunque, debido a la situación económica, su venta resulta complicada, según las mismas fuentes.
El expediente de regulación de empleo, que ya ha sido presentado ante el Govern, se encuentra ahora en periodo de consulta y, según lo previsto, los operarios con contrato fijo de la constructora aceptarán la medida propuesta, aunque la decisión final la tomará la Conselleria de Trabajo.
Obras
La difícil situación por la que pasa Edificaciones Ramos se conoció hace dos semanas a raíz del retraso de las obras que la empresa lleva a cabo en el colegio Mateu Fontirroig de Maó. El delegado insular de Educación del Govern balear, Joan Coll, explicó en su momento que la demora en los trabajos se debía a que los industriales no suministraban el material necesario a la empresa debido a sus problemas económicos.
Todavía se desconoce cómo afectará la noticia de la presentación del ERE a las obras del centro educativo aunque, tal y como apuntó Coll, en el caso de que Edificaciones Ramos no tenga capacidad para finalizar los trabajos iniciados en el Mateu Fontirrog, será necesario contratar a otra empresa para que lleve a cabo los acabados y el comedor, todavía por terminar.