Un centenar de trabajadores de la fábrica de Quesería Menorquina, propiedad del grupo Nueva Rumasa, se han concentrado este lunes frente a las instalaciones de la planta ubicada en el Polígono Industrial de Maó para solicitar la continuidad de la fábrica.
Haciendo frente a la intensa lluvia, los operarios no han cesado de pitar y de hacer ondear pancartas e incluso llegaron a paralizar durante unos minutos el tráfico al invadir una glorieta cercana a la planta.
La portavoz del Comité de Empresa, Margot Sastre, ha señalado que la movilización de este lunes es "un primer paso" antes de la concentración que llevarán a cabo de manera conjunta todos los trabajadores que pertenecen al grupo de Ruiz-Mateos prevista para el próximo 12 de marzo en Madrid.
El objetivo de esta marcha es reclamar a Nueva Rumasalos más de tres millones de euros que adeuda en salarios y defender los aproximadamente 5.000 puestos de trabajo que integran su plantilla.
Sastre ha indicado que las líneas de producción están "prácticamente paralizadas" en la planta de Quesería Menorquina "Trabajamos con cuentagotas", ha denunciado la portavoz del Comité de Empresa, quien ha puntualizado que los empleados tan sólo trabajaron un día y tan sólo durante unas hora la semana pasada.
"La solución a esta problemática pasa porque está fábrica se ponga en manos de alguien que esté dispuesto a gestionarla", ha remarcado Sastre. En este punto, no ha querido ahondar sobre la posibilidad de que el grupo Ruiz-Mateos se desprenda de la planta menorquina.
"Todas las partes implicadas en este conflicto están trabajando intensamente para encontrar cuanto antes una solución", ha remarcado. En este sentido, Sastre ha apuntado la necesidad de que la resolución llegue en un breve plazo de tiempo ya que "cuanto más tiempo pase más peligro corre la fábrica y más complicado resultará recuperarse".
La portavoz del Comité de Empresa ha declinado dar a conocer las negociaciones concretas que se están llevando a cabo a día de hoy. Sin embargo, ha concretado que los trabajadores están satisfechos con el apoyo que han obtenido por parte del Govern y del Consell insular.