Una avería en un cable subterráneo de la zona del Polígono Industrial de Maó (POIMA) dejó ayer sin suministro eléctrico durante una hora a unos 200 clientes de ENDESA. El apagón se inició alrededor de las 12.20 horas, según informaron fuentes de la compañía, en pleno horario comercial, aunque varios abonados replicaron que los primeros cortes de luz se produjeron pasadas las 11 horas.
Algunas empresas se vieron obligadas a cerrar antes de hora y otras, especialmente las grandes superficies de alimentación, tuvieron que recurrir a sus grupos electrógenos auxiliares para mantener el suministro energético y evitar daños en alimentos perecederos. Los cortes de luz se sucedieron de forma intermitente, al menos una media docena de veces, a lo largo de la mañana según explicó al "Menorca" uno de los clientes de una gran superficie de alimentación.
"Los disparos eléctricos nos han fastidiado bastante. Los motores de las máquinas sufren con las subidas y las bajadas de tensión. Seguramente la próxima semana tendremos alguna maquina averiada", apuntó.
"Es preferible un parón en el suministro a estar de esta forma. Lo que demuestran es una falta de respecto a las inversiones de la gente, ya no me creo las excusas que dan", añadió en referencia a la compañía ENDESA.
El cable eléctrico averiado comunica dos transformadores y aunque la luz se restableció sobre las 13.30 horas, a media tarde de ayer aún trabajan en el arreglo de la avería varios operarios en uno de los transformadores.