Salvo medida extraordinaria, Menorca quedará con toda probabilidad sin líneas marítimas de interés público a principios de octubre. El procedimiento de contratación abierto el pasado mes de mayo para cubrir la prestación de este servicio se ha frustrado al haber sido aceptada una impugnación presentada por Acciona Transmediterránea. Esta circunstancia deja a la dirección general de Marina Mercante prácticamente sin margen de maniobra para seleccionar a tiempo una naviera que quiera operar las conexiones entre Maó, Valencia y Barcelona, garantizando una oferta mínima de transporte y frecuencia a lo largo de todo el año.
"Tal y como están ahora las cosas, nos podemos encontrar en invierno sin un sólo barco", alertan fuentes del puerto mahonés, conscientes de lo que esto supone no sólo para los usuarios sino también para el mantenimiento de la actividad portuaria en Levante, muy castigada a consecuencia de la puesta en marcha del dique de Son Blanc en Ciutadella.
En este sentido cabe recordar que el procedimiento de contratación, cuyo presupuesto base de licitación ascendía a 2,6 millones de euros, establecía para el caso de Menorca una oferta semanal de 452 plazas de pasajeros y 100 vehículos entre Barcelona y Maó (un viaje diario dos días a la semana), y de 100 plazas de pasajeros y 30 vehículos entre Maó y Valencia (un viaje un día a la semana). Sin una naviera contratada para cubrir estas líneas de servicio público, esta oferta podría desaparecer si las compañías estiman que no es rentable.
Al concurso- segundo convocado por haberse quedado desierto inicialmente- sólo se presentó Baleària, si bien Acciona- actual prestataria del servicio- impugnó unas bases que incluían la posibilidad de que el contratista propusiese otros puertos comerciales diferentes al de Maó, siempre que éste reuniese las condiciones exigibles en materia de seguridad marítima.
El redactado de esta prescripción se contraponía con uno de los requisitos que rigen las líneas marítimas que salían a licitación relativo a la declaración de interés público del puerto que cuente con ellas, algo que no sucedía con el nuevo puerto de Ciutadella, que quedaba excluido inicialmente de este servicio.