Han transcurrido sesenta años, y las canas ya platean sus sienes, con una trayectoria vital que ha conocido el gran cambio socioeconómico de Menorca.
Todos los que acudieron a la convocatoria de la ‘generación del 1951', el sábado en el hotel Sagitari de Ciutadella, tuvieron la oportunidad de compartir un encuentro presidido por la amistad en el que recordaron vivencias y anécdotas. La comisión organizadora se puso en contacto con todos los integrantes de esta generación que suma seis décadas para invitarlos.
Hubo momentos de nostalgia, también risas y la evocación de tantos momentos en los años de infancia, adolescencia y juventud. También dedicaron los asistentes, antes de compartir una cena amable y distendida, un recuerdo vivo y sentido para quienes han fallecido.
Este grupo de ‘sesentañeros' de Ciutadella echó una vista atrás a aquellos años marcados por las dificultades y la precariedad. Hoy, padres de familia que ven crecer las siguientes generaciones, pero en plenitud vital y con ganas, son conscientes de pertenecer a otra generación, que conoció la postguerra y abrió las puertas hacia la industria y el turismo.