El Ayuntamiento de Maó pretende recortar a la mitad las prestaciones sociales que perciben actualmente los trabajadores municipales para la compra de lentillas, monturas de gafas, plantillas, calzado ortopédico, limpieza dental, empastes, endodoncias y la adquisición de un audífono, entre otras ayudas, tal y como refleja el gráfico adjunto a la noticia. El Consistorio destina a este fin unos 300.000 euros anuales y pretende rebajar esta partida a 150.000 euros.
El teniente de alcalde y concejal de Servicios Generales, Salvador Botella, hace hincapié además en que el acceso a estas ayudas sociales no será generalizado para toda la plantilla como viene sucediendo hasta ahora, sino que básicamente irán destinadas a aquellos trabajadores municipales con menor poder adquisitivo, es decir, con unos ingresos anuales por debajo de unos 30.000 euros.
Negociación
La intención del equipo de gobierno es alcanzar un acuerdo con los sindicatos antes de principio de año sobre este y otros reajustes que quiere aplicar en las cuentas públicas, a la vista de la delicada situación económica que atraviesa el Ayuntamiento. No obstante, en el caso de que no haya consenso, el teniente de alcalde y concejal de Servicios Generales, Salvador Botella, advierte que el Consistorio está facultado para aplicar los reajustes "de forma unilateral". El edil justifica la medida en la dificultad que tiene el Ayuntamiento a la hora de hacer frente al pago de prestaciones sociales conveniadas años atrás, pero modificadas e incrementadas de forma sucesiva a través de la Comisión Paritaria. El objetivo del equipo de gobierno es retrotraer el importe de dichas ayudas a la cuantía que tenían establecida a la fecha de vencimiento del convenio colectivo del día 31 de diciembre de 2007.
Asimismo, el Ayuntamiento de Maó pretende aplicar un "mayor control" del existente hoy día sobre el plus de 60 euros en concepto de absentismo que perciben actualmente los trabajadores municipales. Así, en el caso de una ausencia injustificada, el trabajador verá reducido ese plus al 50 por ciento, y si esta situación se repite, ese plus se eliminará.
Maó, al igual que Alaior, ha denunciado los convenios y pactos suscritos en materia laboral en los últimos años, decisiones que han desatado una fuerte contestación en la calle por parte de los empleados públicos, especialmente entre los policías locales. Algunos ayuntamientos de la Isla estudian ya pequeños reajustes en sus plantillas, aunque a excepción del Consistorio de Alaior, ninguno plantea despidos de personal a corto plazo.