Menorca es un destino poco conocido para la práctica del golf, la promoción turística se ha centrado en otro tipo de deportes y la controversia social y política que suscita este producto sigue siendo una circunstancia desfavorable para ampliar la oferta. "Es la pregunta del millón, si lo ideal es lograr que venga más gente y luego aumentar la oferta o si primero construyes otros campos; los jugadores piden más, como los esquiadores quieren más pistas e ir cambiando", afirmó ayer Paola Ferroni, directora del Golf Son Parc, el único existente en la Isla.
Ferroni asistió recientemente a un 'workshop' temático sobre golf, celebrado en Mallorca y organizado por la empresa especializada M3 Solutions. Allí pudo comprobar -con 14 citas rápidas de 15 minutos por touroperador-, que la mayoría de las empresas que mueven golfistas hacia Balears y otros destinos no conocían Menorca. "Algunos se mostraron interesados al ser un mercado nuevo para ellos, otros lo veían difícil al existir un sólo campo y otros valoraron la oportunidad de trabajar de manera conjunta con Mallorca, pero el problema es cómo llegar". De hecho, Golf Son Parc ya intenta trabajar creando circuitos entre Mallorca y Menorca, con la conexión marítima Alcúdia-Ciutadella, pero las comunicaciones no lo hacen viable en invierno sino únicamente en temporada alta. Los representantes de los mayoristas procedían de mercados extranjeros, como Alemania, Reino Unido, Francia, Rusia y Suecia. "La impresión en general del 'workshop' es buena, tienes el tiempo suficiente para realizar contactos que después puedes ampliar", señaló Ferroni.