En cuanto el BOIB publique la ordenanza para la Inspección Técnica de Edificios (ITE), Ciutadella será el primer municipio de Menorca en contar con una especie de ITV para edificios de más de cincuenta años. Unas revisiones obligadas por ley para aquellos municipios de más de 25.000 habitantes que en breve también se implantarán en Maó y que, según el presidente del Colegio de Arquitectos Técnicos, deberían aplicarse en toda la Isla. Poncio Palliser asegura que "el estado de un edificio no tienen nada que ver con el número de habitantes del municipio en el que radica, son cosas totalmente independientes". En este sentido, Palliser añade que "nosotros llevábamos años proponiendo esta medida, e incluso lo propusimos al Consell".
De momento, Ciutadella abrirá esta vía. La ordenanza afectará a un gran número de inmuebles, pero a día de hoy aún es bastante desconocida. Básicamente, se tratará de una inspección ocular que se puede realizar en pocas horas. Así lo explica el arquitecto técnico Toni Gordi. Durante esta visita, y según la ordenanza, el inspector debe comprobar tres aspectos fundamentales: el estado de la estructura y la cimentación, las fachadas y las cubiertas. En este punto, surge una primera duda sobre la ordenanza, puesto que una simple inspección ocular no puede comprobar el estado de los cimientos de un edificio.
Quizás por esto, a pesar de que en el texto de la ordenanza se especifica que deben analizarse los cimientos, en el modelo de informe que ha elaborado el propio Ayuntamiento este apartado no figura en ningún lugar.
En la inspección, el técnico analizará diferentes aspectos de la estructura, la fachada y los tejados. Tras la visita, deberá realizar un diagnóstico, y puede catalogar el edificio como favorable o desfavorable. En el primer caso, no hay más consecuencias. En el segundo, el propietario del edificio tiene tres meses para encargar un proyecto que solucione las deficiencias detectadas.
En Ciutadella, son los propietarios de los edificios los que deben entregar el informe técnico al Ayuntamiento. En Catalunya, en cambio, son los propios técnicos los que hacen llegar el informe a la administración. De esta manera, se aseguran que todos los análisis, tanto favorables como desfavorables, llegan con la misma celeridad al Consistorio, evitando posibles demoras interesadas para retrasar las obras que se puedan derivar del informe.
Cuando el BOIB publique la aprobación de la ordenanza de la ITE en Ciutadella, empezará a contar el plazo para realizar las inspecciones. Dentro de este año, solamente será obligatoria para los edificios construidos antes de 1900, o aquellos que cuentan con alguna catalogación que los hacen especiales. De este modo, entre los primeros edificios que deberán ser sometidos a la ITV para edificios serán los palacios señoriales de Ciutadella. En este sentido, Toni Gordi adelanta que "se tratará de inspecciones complicadas, por lo grandes y complejos que son esos inmuebles".
Posteriormente, en próximos años deberán realizarse inspecciones a otros edificios, hasta que en 2015, todos los que tengan más de 50 años deberán contar ya con el informe preceptivo. A día de hoy, el Consistorio no dispone de una relación con la antigüedad de todos los edificios de la ciudad. Ante esta situación, Gordi se pregunta cómo actuará el Consistorio para asegurar que los inmuebles estén al día en la ITE si no controla todas las fechas de construcción. En este aspecto, otro arquitecto técnico apunta a que el Consistorio podría basarse en los datos del Registro Catastral.
Sea como sea, cuando comiencen las primeras inspecciones, los principales problemas se hallarán en los tejados y los porches. Así lo cree Toni Gordi, quien explica que "la impermeabilización que se realizaba años atrás no tenía la misma calidad que ahora, y lo de la tela asfáltica ni siquiera se conocía. Las pendientes se construían con 'sauló', y aguantaban hasta que aguantaban, y cuando filtraban agua producían humedades que perjudicaban los forjados y las vigas. De todos modos, no creo que sean casos muy graves, y sobre todo referentes a viviendas construidas entre los años 1950 y 1970". Al igual que se puede intuir por dónde surgirán los problemas, también es posible saber cuándo deberán realizarse más inspecciones. En Ciutadella, explica el arquitecto técnico, se construyó sobre todo entre los años 1970 y 1975, y cuando esos edificios cumplan cincuenta años (entre el 2020 y el 2025) será cuando se genere más trabajo de inspección.