Vicenç Tur se presentó ante los delegados como el abanderado de la militancia. "Necesitamos más participación, con más militantes, y con unos militantes más militantes", aseguró. El exalcalde de Maó apostó por "un partido sin liderazgos individuales y sí con liderazgos compartidos", que permitan al PSOE conseguir una mayor organización interna. Así, defendió que "con 400 militantes, funcionamos como una federación, con muchos órganos pero poca conexión entre agrupaciones". Por eso, Tur promulgó "un comité insular más autónomo y menos condicionado por la ejecutiva del partido, con capacidad para generar debate y marcas las líneas maestras del partido".
El entonces aspirante a secretario general defendió en su discurso "la necesidad de caminar hacia un escenario en el que la gente que lleva las riendas del partido no está en la Administración. En este aspecto hemos fallado hasta ahora, puesto que hemos tenido a la misma gente al frente del partido y al frente de las instituciones, y esto nos ha impedido segundas lecturas y debates previos que son muy necesarios". Tur quiso dejar muy claro que "el secretario general no está para suplantar a los portavoces del partido en las instituciones, sino que contarán con mi total y leal apoyo".
Vicenç Tur criticó la estructura nacional del partido, al asegurar que "el partido tenía que haber invertido el orden de los congresos, primero los más próximos y al final el estatal, porque así serían los de abajo los que configurarían los de arriba". En este sentido, Tur reclamó "una apuesta realmente federal en nuestro partido, invirtamos la pirámide dando el protagonismo a los de abajo. Seguro que así se ilusiona la militancia".
En su discurso, Vicenç Tur defendió su preparación y la del grupo de militantes que le apoyan. "Estamos preparados para ilusionar a la militancia, y de este modo volver a ilusionar a la ciudadanía". En este sentido, el ex alcalde de Maó propuso dar una mayor formación a los representantes del PSOE en las instituciones, y propiciar debates internos en el partido. "Debemos recuperar esta función que hemos perdido, el debate", concluyó.
El discurso de Marc Pons como candidato
Marc Pons reclamó reiteradamente en su discurso la necesidad de unidad en el partido. Pons aseguró incluso que, tras el congreso del PSOE de Balears, "ofrecí retirar mi candidatura para hacer posible una tercera vía que permitiera superar las diferencias entre Vicenç y yo". Quien entonces aspiraba a revalidar su cargo aseguró a los delegados que "hoy no escogemos al cabeza de lista, sino a quien debe liderar la oposición en Menorca, quien deberá confrontarse con la derecha más dura". En este sentido, Pons ligó la figura del secretario general con la de jefe de la oposición, algo que no hizo Tur.
Fue en esta línea en la que Marc Pons aseguró que "realmente el proyecto político es lo más importante en un partido, pero también lo son las personas que lo defienden. De ellas depende que este proyecto gane o pierda credibilidad". Tras recordar a varios socialistas históricos en la Isla, Pons desgranó algunas ideas que, según aseguró, deben ayudar "a un cambio de chip real". Así, apostó por un plan de refuerzo personal y económico de las agrupaciones locales, la formación de un consejo de sabios con los históricos del partido, una conferencia anual para pasar balance de las decisiones tomadas, un plan de viabilidad para cada agrupación y una revisión de la política de pactos. "Cambios de gran profundidad que ya hemos iniciado en los últimos meses", remató Pons.
El mercadalense se presentó ante los cien delegados asegurando que "yo sí quiero recuperar a los votantes que dejaron de confiar en nosotros, reconociendo los fallos cometidos, y estoy dispuesto a cambiar para evolucionar". Este cambio, no obstante, tenía una condición básica, la unidad. En la misma línea que Vicenç Tur, Pons afirmó también que "aquí no sobra nadie". Recordó que, tras la debacle electoral de mayo, se reunió con varias personas, entre ellas Vicenç Tur, para analizar el camino a seguir entonces por el partido. "Podríamos haber decidido dejarlo, buscar culpables o podíamos seguir desde la unidad entre todos. Entonces decidimos que la derrota no nos debía llevar a una deriva interna que nos quitara fuerzas", aseguró, una hora y pico antes de perder la votación.