Los jóvenes de entre 16 y 18 años que atenten contra del patrimonio público en un acto de vandalismo o gamberrada -como una pintada, o un ataque al mobiliario urbano, entre otros- podrán acogerse a la nueva ordenanza que permite sustituir una sanción económica por la realización de servicios en beneficio a la comunidad.
El Ayuntamiento de Es Castell prevé aprobar esta noche en el pleno la ampliación de dicha ordenanza que, aunque ya se aplique en el municipio, la franja de edad entre los 16 y los 18 años no estaba amparada legalmente, según matiza el alcalde Lluís Camps quien indica que "esta figura sancionadora pretende tener una función pedagógica y de reflexión entre un colectivo que está en vías de crecimiento".
Según señala el primer edil, en varias ocasiones la sanción que marca el juez es asumida por los padres cuando, de esta manera, "serán los hijos quienes sepan lo que significa hacer un esfuerzo para restablecer lo que han dañado". En este sentido, Camps informa que algunos ciudadanos, mayores de edad, se han acogido a esta figura por no poder asumir la sanción económica dictaminada por el juez.
En esta línea, Lluís Camps precisa que el Ayuntamiento rubricó un convenio con Instituciones Penitenciarias, hace aproximadamente un año, por el que accedía a recibir a algún recluso que cumpla el tercer grado y al que se le pueda dar la oportunidad de ofrecer un servicio para la comunidad a cambio de una rebaja de la condena fijada.
Así, Camps señala la predisposición a colaborar en "la reinserción social de las personas" y no descarta que "pronto tengamos a algún preso".
El Ayuntamiento eleva también esta noche al pleno la expropiación de una parcela clasificada como zona verde en Trebalúger y que supone para las arcas municipales el pago de unos 95.000 euros. Camps señala que el Consistorio ha pactado con la propiedad el pago en un año con el fin de evitar la suma de más intereses.
Banda de Ciutadella
Por otra parte, el Consistorio también prevé aprobar en el pleno el acuerdo alcanzado con la banda de música de Ciutadella que será la responsable de amenizar las fiestas de Sant Jaume.
La cuantía que percibirá la agrupación asciende a 18.000 euros (una bajada de un diez por ciento respecto a la cuantía pagada el pasado año), lo que incluye todos los actos musicales que se celebren durante las fiestas. En este sentido, Lluís Camps señala que los motivos por los que la Banda de Es Migjorn no puede participar en las fiestas son la falta de personal. Y es que, al celebrarse en días laborables, "la agrupación no puede contar con la totalidad de los músicos que requiere la actuación".
Por otra parte, cabe señalar que el pleno también prevé aprobar la adjudicación de la primera licencia de taxi adaptado para minusválidos.