La decisión de un hotelero de Cala en Porter de tapiar un viejo camino ha generado cierto malestar vecinal. El sendero se encuentra junto al Hotel Sa Barrera y une la calle del mismo nombre con el Paseo Marítimo de esta urbanización de Alaior. Los residentes aseguran que han utilizado ese paso durante años para ir a la playa y se preguntan qué derecho tiene el hotelero a cegar este acceso. Los más indignados están dispuestos incluso a recoger firmas para que el camino vuelva a su situación original. "La calle no es propiedad de nadie", afirman.
Una vecina relata que el propio Ayuntamiento se encargaba de desbrozar la maleza que crecía en sus orillas. Sin embargo, desde hace unos años, un grupo de propietarios de chalés cercanos, en su mayoría de origen extranjero, realizan esta tarea a la vista de que la brigada municipal dejó de limpiar la zona. Ahora, estos mismos vecinos explican que han visto como en apenas unos días, y en pleno verano, el camino era tapiado por el Hotel Sa Barrera aledaño.
Hurtos y suciedad
El propietario del establecimiento hotelero, Bombana Herculiano, afirma rotundo que el camino forma parte de su parcela. "El catastro lo dice bien claro", recalca. Explica que regenta el Hotel Sa Barrera desde hace ocho años y que al principio no le molestaba en exceso que una parte de su propiedad fuera una zona de paso.
Sin embargo, asegura, que tras sufrir varios hurtos se ha visto obligado a cerrarla. "Se han llevado sillas, tumbonas y otras cosas. No son muy grandes, pero he tendido que poner incluso una cámara", precisa. El empresario denuncia además que algunas personas sueltan perros en esta porción de terreno para que realicen sus necesidades. "Los dejan sueltos y luego nadie limpia", se queja. Justifica asimismo su decisión en el hecho de que el camino ahora cegado era un lugar de paso de jóvenes hacia una zona de botellón. "Esto es un hotel, tengo que dar una imagen a mis clientes, no puedo tener perros sueltos y la suciedad que dejan", explica.
El propietario del hotel insiste en que ha solicitado el permiso del Ayuntamiento de Alaior para tapiar la zona. "Los vecinos deben entender que esto es una parcela privada", recalca.