Los bares del centro histórico de Maó podrán poner música hasta las 06.00 horas de la mañana del día 8 de septiembre, con motivo de las fiestas patronales de la Mare de Déu de Gràcia, tal y como ha informado este lunes el teniente de alcalde de Servicios Generales, Salvador Botella, durante un encuentro con los propietarios de los establecimientos comerciales que se ha desarrollado esta mañana en la sala de actos del Ayuntamiento.
Botella, acompañado por la alcaldesa, Águeda Reynés, y la concejala de Cultura y Fiestas, Elisa Mus, ha recordado que la música deberá silenciarse en el momento en que pasen los caballos y durante el tradicional jaleo. "Seremos muy escrupulosos con esta medida y exigiremos su obligado cumplimiento", ha subrayado.
Sin embargo, el edil ha apelado al sentido común de los propietarios de bares y restaurantes a la hora de conjugar sus intereses particulares con el desarrollo de la fiesta. En esta línea, ha remarcado que no se ha establecido un volumen máximo para la música en las barras habilitadas, aunque ha precisado que los altavoces deberán instalarse hacia el interior de los locales. "Si no se mantiene un orden, el año próximo nos veremos obligados a ser más restrictivos", ha alertado.
Del mismo modo, ha puntualizado que los bares ubicados en la Plaça Constitución, donde se celebra el jaleo, no podrán poner música ni durante la fiesta de los caballos ni una vez que ésta finalice. "Los silencios también tienen su importancia", ha dicho.
Por otro lado, Botella ha especificado que las barras instaladas no podrán sobrepasar las dimensiones de la fachada de los establecimientos ni ocupar ningún espacio de la vía pública.
Asimismo, ha subrayado que la entrada a los aseos de los locales deberá estar permanentemente habilitada para su uso.
Botella ha animado también a los propietarios de los establecimientos de Máo a utilizar vasos de cartón por motivos ecológicos y de seguridad para los caixers y, en esta línea, ha avanzado que el año próximo se obligará a todos los locales a usar este tipo de recipientes.
Por otra parte, el teniente de alcalde de Servicios Generales ha apuntado que se controlará especialmente la venta ilegal e incontrolada de bebidas durante la fiesta e incluso ha remarcado que se está planteando la posibilidad de que un policía de paisano vigile los posibles incumplimientos en este sentido.
Finalmente, Botella ha indicado que, por primera vez, las verbenas que se celebrarán los días 7 y 8 por la noche correrán a cargo de una empresa privada y que, de cara al año próximo, se puede plantear un concurso público si hay más establecimientos interesados en gestionar estos eventos musicales.