El obispo de Menorca siguió por televisión, desde la sede episcopal en Ciutadella, la retransmisión en directo de la gran noticia para la Iglesia y la primera comparecencia del Papa Francisco I ante la humanidad. Monseñor Giménez Valls recibió la buena nueva "con enorme alegría y una gran sorpresa, por tratarse de una persona que parece muy próxima a la gente".
Destacó "el nombre muy significativo" del nuevo Papa, "que recuerda el testimonio de San Francisco de Asís". También resaltó su procedencia de Argentina, "un país que cuenta con un elevado número de católicos". Para el obispo de Menorca, el Papa Francisco I "representa un hombre bueno, que nos anima a todos a presentar ante la humanidad el Evangelio de Jesús con mucho entusiasmo y mucha alegría".
Para monseñor Salvador Giménez el nombramiento despierta el entusiasmo de seguir a Jesús en pleno siglo XXI. "Ha sido un gran pastor y conoce las dificultades que existen en la sociedad de hoy para conocer a Jesús. Estoy convencido de que llegará al corazón de todas las personas del mundo".