La odisea continúa para los clientes de la compañía naviera Entre Islas y Canales, que ha regresado temporalmente a Ciutadella para cubrir la ruta con el puerto de Cala Ratjada durante las fiestas de Sant Joan. Cerca de 800 clientes llegaron finalmente ayer a su destino con grandes retrasos, pero ahí no ha acabado todo. Fuentes de la naviera informaban el pasado martes de que la previsión apuntaba a que los problemas técnicos sufridos por la embarcación estuvieran solventados ayer. Finalmente no pudo ser, y los clientes con pasaje tuvieron que ser recolocados de nuevo en los servicios de las otras dos navieras que operan en el dique de Ciutadella.
Baleària tenía previsto trasladar a un centenar de pasajeros en el "Jaume I" con destino a Alcúdia. Iscomar también colaboró en la operación regreso, aunque en este caso no supieron cuantificar el número exacto. El "Balear Jet" tenía programados para ayer dos rutas hacia Mallorca, a las 10.45 y a las 19.30 horas. Inicialmente, el plan de la naviera era operar la línea hasta finales de este mes.La naviera no responde
Durante toda la jornada de ayer resultó imposible contactar con los responsables de Entre Islas y Canales, empresa que antes se llamaba Interilles, así como con el servicio de atención al cliente. En la ventanilla de la estación portuaria de Ciutadella, el personal de tierra informaba de que a lo largo de la jornada se emitiría un comunicado de prensa que, al cierre de esta edición, no había sido recibido.
No obstante, trascendió por otras fuentes que el barco había sido trasladado durante la madrugada a Cala Ratjada, con uno de los motores que tenía operativo, para ser reparado en su puerto base, donde surgieron más complicaciones. El departamento de comunicación de Ports de les Illes confirmaba que la embarcación sufrió durante el proceso dos vías de agua. Según la misma fuente, ello obligó a activar el protocolo de emergencia para estos casos.
Hasta allí se trasladaron distintas fuerzas del orden y se procedió a colocar en el agua una barrera de contención en previsión de que se pudiera producir un vertido, algo que finalmente no ocurrió, según informaron desde la Conselleria. Sin embargo, también por precaución, se desplazó hasta el lugar un camión cuba que extrajo 2,5 toneladas de "aguas grises y negras" del barco. En la operación también participó un equipo de buzos.
Desde Ports informaban ayer tarde que la situación estaba totalmente controlada y el barco a flote. Por el momento se desconoce cuando estará listo para volver a navegar.
Cabe recordar que la embarcación ya había intentado ser reparada sin éxito el martes en Ciutadella, donde era día festivo. La naviera, según informó personal de tierra, se puso en contacto con un herrero de Ferreries, pero ante la imposibilidad de solventar el problema técnico se optó por volver a Cala Ratjada.
Quejas
Los problemas y perjuicios causados por la avería tuvieron mucho eco en las redes sociales, especialmente en Twitter, donde se generó el hashtag #mallorquinstiratsaCiutadella. Por lo leído en la red, algunos de los afectados se quejaban de que una vez en Alcúdia no se habían habilitado el número suficiente de autobuses para trasladar a todo el mundo hasta el destino final, Cala Ratjada.
Fueron muchos también los que se quejaron de que la compañía tardó demasiado en facilitar información a los pasajeros sobre lo que estaba ocurriendo. Se da el caso de algunos pasajeros que llegaron a sus casas hasta 13 horas más tarde lo inicialmente previsto.