Las condiciones de trabajo son cada vez más precarias y menos decentes. Y es que la crisis económica y financiera ha servido como pretexto para precarizar las condiciones laborales, destruir empleo y degradar la vida de miles de personas para abocarlas a la pobreza.
Así lo alertaron ayer los responsables sindicales de UGT y CCOO, Servando Pereira y Patricio Serra, para quienes, a pesar de que el número de desempleados vaya reduciéndose, los contratos son cada vez más precarios y con menos derechos. Según los datos facilitados por los sindicatos, el mes de septiembre se registraron 1.679 contratos de los que 1.470 eran temporales, mientras que solo 209 fueron indefinidos (un 12,44 por cien).
La tasa de temporalidad en la Isla fue de un 87,55 por ciento, esto es, un 0,86 por ciento más que el mismo período del ejercicio anterior. Muchos de estos contratos son, además, a tiempo parcial.
Los portavoces sindicales hicieron esta advertencia en el marco del Día Mundial por el Trabajo Decente, que la Confederación Sindical Internacional lleva celebrando desde hace ocho años con el objetivo de reclamar un trabajo digno y reforzar el poder de los trabajadores para poder encauzar la economía.
En este sentido, Patricio Serra aboga por un pacto por el empleo. No obstante, asevera que «el Govern no da su brazo a torcer y sigue sin existir diálogo social».
Asimismo, tanto UGT como CCOO hacen hincapié a la elevada tasa del paro de larga duración que año tras año sigue incrementando. Y advierten de que las políticas en materia de empleo que aplican los gobernantes conducirán a un mayor debilitamiento del Estado del Bienestar.