La anunciada llegada del servicio de radioterapia a Menorca en diciembre de 2015 ahorrará a los pacientes menorquines unos 400 desplazamientos a Palma para recibir tratamiento en el hospital de Son Espases, los necesarios para asistir a las 25 sesiones que de media requiere cada paciente y que a partir de dicha fecha podrán recibir sin moverse de la Isla, según las cifras aportadas ayer por el Servei Balear de Salut.
En total alrededor de 2.000 sesiones anuales que tienen que pasar los 80 menorquines que cada año se tienen que desplazar y que les obligan a pasar un tiempo medio de cinco semanas en la capital mallorquina para someterse a un tratamiento que tiene una duración de menos de cinco minutos al día.
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