La última palabra a la hora de autorizar la instalación de terrazas frente a viviendas particulares en Ciutadella la tendrá el Ayuntamiento. De esta manera, la concejal de Gobernación Juana Maria Pons zanja el debate que se abrió durante la presentación de alegaciones a la ordenanza de ocupación de la vía pública.
Pons recuerda que la normativa aprobada por el Consistorio permite a los vecinos opinar sobre si quieren que algún bar o restaurante cercano pueda instalar mesas y sillas frente a su vivienda. Sin embargo, aclara la concejal, se trata solamente de una opinión no vinculante. «Se tendrá muy en cuenta lo que digan los vecinos, evidentemente, pero no serán ellos quienes autorizarán o no las terrazas», concluye. Es decir, en casos extremos el Consistorio podría autorizar la instalación de terrazas incluso con la oposición de los vecinos. Ahora bien, Pons matiza que «respetaremos a los vecinos, y si una terraza obstaculiza el paso o ha creado problemas, no la permitiremos».
De esta manera, la concejal de Gobernación se decanta por las peticiones de las asociaciones empresariales, que habían pedido precisamente que los vecinos no tuvieran poder para vetar la instalación de una terraza. En cambio, desestima la petición de la asociación de vecinos Ciutadella Vella, que no solamente quería que la opinión de los residentes fuera vinculante, sino que además pedía que en cualquier momento del año el vecino pudiera obligar a la eliminación de una terraza frente a su casa a pesar de que la hubiera autorizado anteriormente.
El pleno del Ayuntamiento de Ciutadella deberá ratificar la ordenanza de ocupación de la vía pública, incluyendo aquellas alegaciones que se consideren positivas, para que el texto quede definitivamente validado.
Ara els bars tenen permís per fer-se de s´altra acera! jajajajaja