El Consell no tendrá que suprimir ninguna de las tres rotondas o pasos inferiores previstos en la reforma de la carretera general en el tramo comprendido entre Ferreries y Ciutadella. El pleno de la Comisión Balear de Medio Ambiente (CBMA) aprobó ayer el informe favorable al proyecto, emitido por el subcomité de evaluaciones de impacto ambiental, que sí establece una serie de prescripciones que afectan a cuatro de los seis enlaces previstos en los doce kilómetros de actuación.
La Comisión plantea la supresión del enlace con vial de servicio en la zona del Castillo Menorca (punto kilométrico 35-540); también obliga a redimensionar el enlace con paso inferior en el punto del acceso a Cala Pilar y Camí de Sant Felip, para darle más anchura y dar acceso a los vehículos pesados, minimizando la afección del encinar y garantizando las medidas de seguridad del vial.
Otra de las condiciones del informe es reducir las dimensiones del enlace a la altura de la cantera de Son Sintes (rotonda ovalada inferior), en el punto kilométrico 36-950, para minimizar la ocupación y ejecutar el vial de servicio lo más cerca posible de la carretera, de modo que se afecte lo menos posible el encinar. Otro de los enlaces que se modificará será el de Sa Naveta des Tudons, que se tendrá que reubicar. Aquí el informe de la Comisión indica que el enlace debe situarse fuera de la zona inundable y se deberá escoger el diseño de intersección más adecuado para la nueva ubicación.
El informe favorable no alude a la rotonda de la entrada de Ciutadella, en el punto en el que coinciden los accesos del Camí des Caragolí y la planta de prefabricados, que será en superficie. A la altura del Camí dels Alocs se mantiene el nudo previsto en el proyecto.
Desde la Conselleria de Movilidad, su titular, Luis Alejandre manifestó ayer que las prescripciones son «perfectamente asumibles» y se basan en la colaboración entre la Comisión de Medio Ambiente, «cuya técnica vino a Menorca, escuchó e hizo sus propuestas», y el propio Consell. La bióloga pasó tres días en la Isla trabajando sobre el terreno.
Algo diferente de lo que ocurrió con el tramó de Maó a Alaior -afirmó-, ya que «el técnico asignado no vino siquiera a Menorca». El conseller subrayó que el proyecto fue aprobado con catorce votos a favor en el subcomité técnico y en el pleno de la Comisión Balear de Medio Ambiente «por unanimidad de sus dieciséis miembros».