Mucho trabajo de calle, encuentros con afiliados y actos a precios populares han ganado la partida a los mitines y al gasto propagandístico de los partidos políticos de cara a las elecciones europeas del próximo día 25. Esta medianoche comienza una de las campañas electorales más austeras de las últimas celebradas en Menorca, si no la que más, ya que las principales formaciones prácticamente han renunciado a la contratación de publicidad externa.
Los partidos no solo se aprietan el cinturón sino que además, el ámbito europeo de los comicios hace que el presupuesto se maneje desde Madrid o Palma y no desde la Isla. Así, el Partido Popular de Menorca no cuenta con una asignación específica, aún tiene pendiente la contratación de vallas y el gasto de merchandising viene marcado y es asumido por el PP estatal. Las juntas locales organizarán diferentes actos, que pagarán en colaboración con los propios afiliados y con aportaciones ajustadas a los tiempos de crisis.