El Camí de Cavalls se saldaba ayer con un accidente en el tramo que discurre por la urbanización de Son Bou. El rescate no acarreó mayores dificultades. No obstante, si el accidente se hubiera producido en algunos de los puntos vulnerables del Camí, la labor se hubiera complicado.
El accidente se producía el día en que Consell y Govern presentaban el plan de seguridad del Camí de Cavalls que permite disponer de un conocimiento más detallado de las características de todo el trazado y, con ello, de las debilidades que deben abordarse para dotarlo de la máxima seguridad. La consellera de Administraciones Públicas del Govern, Núria Riera, aseveraba que «la información es seguridad» y añadía que «el Camí de Cavalls es ya de por sí seguro», no obstante este plan «realiza una radiografía del camino palmo a palmo» que permite detectar y solucionar los puntos más vulnerables del trazado.
Se han detallado hasta 22 áreas para el aterrizaje de un helicóptero que facilite las labores de rescate. Además, para cada uno de los 20 tramos en que están divididos los 185 kilómetros del trazado se han posicionado todos los mojones (los 2.347 hitos existentes) sobre un mapa y se han analizado aspectos como tipo de vía, manera más rápida para su acceso, elementos vulnerables, infraestructuras y recursos disponibles y nivel de cobertura telefónica y de radio. La base de datos del 112 dispone ya de toda esta información.
También se han detectado hasta 75 vías de evacuación que permitirán mayor rapidez en el rescate.
En lo que respecta a la cobertura de telefonía móvil, el conseller de Cooperación Local, Juan José Pons, señala que se han establecido los puntos débiles con comprobaciones sobre 461 puntos. De ellos, se han considerado vulnerables las zonas comprendidas entre Faro Nati y Ses Fontanelles, así como los tramos que discurren por La Vall, El Pilar y Ets Alocs, la zona de Platges de Fornells, la de Santa Galdana, Binigaus y el Barranc d'Algendar, además de Favàritx y Sa Torreta.