Ocho millones de muertos y seis millones de discapacitados. Aproximadamente. Este es uno de tantos balances de la Gran Guerra, rebautizada posteriormente como Primera Guerra Mundial, de la que se celebran estos días el centenario de su inicio. Una barbarie que se recordará el lunes a las 20.30 horas en Maó con un concierto de campanas, órgano, trompetas y percusión en la iglesia de Santa María.
En el evento, que fue presentado este viernes por la regidora de Cultura del ayuntamiento de Maó, Elisa Mus, el cónsul honorario de Alemania, Matthias Roters, el campanero Alberto Gil Irondo y el capellán Josep Menguán, intervendrán Tomé Olives al órgano, la empresa Sonostudi, que se encargará de la ambientación musical, y un grupo de trompetistas, percusionistas y técnicos en pirotécnia.