Esta semana han comenzado las tareas de consolidación del acantilado del puerto de Maó en dos puntos.
Por un lado, se trabaja en la zona donde se produjo un desprendimiento el pasado 13 de septiembre, y por otro en la subsanación de una grieta denunciada por los vecinos de la zona.
Se prevé que las labores de consolidación se prolonguen por espacio de unas dos semanas. El presupuesto global de la actuación asciende a unos 20.000 euros.
En paralelo se procederá a la revisión de la Costa d'en Reynés, que permanecerá cerrada al tráfico hasta que los técnicos se cercioren de que no hay riesgo de nuevos desprendimientos de rocas.