Dicen las estadísticas que la donación de una sola persona puede ayudar a salvar la vida de otras tres. Así, se inicia una cadena de favores que gira en torno a una clave, el altruismo. Una virtud que llenó ayer la Sala Multifuncional de Es Mercadal, donde la Germandat Donants de Sangre celebró la habitual fiesta de reconocimiento a sus fieles colaboradores, especialmente a aquellos que durante el año pasado alcanzaron la cifra de 25, 40, 50 y 70 donaciones.
El acto contó con la participación de César Vicente, gerente de la Fundación del Banco de Sangre y Tejidos de Balears, quien puso en valor la figura del donante en la sociedad actual «por el tiempo que dedica a salvar la vida de otras personas». Según explicó, en el conjunto de Balears hacen falta cerca de 37.000 bolsas para cubrir las necesidades de los hospitales, un volumen que por el momento está bien garantizado.
En lo que se refiere a Menorca, la presidenta de los donantes, Rafaela Fiol, desveló que el año pasado en la Isla se llevaron a cabo 110 colectas que sirvieron para recoger un total de 3.804 bolsas. De cara al futuro, Fiol anunció que a partir del próximo mes de septiembre lanzarán una campaña de conferencias en centros educativos para intentar sensibilizar sobre las donaciones a los más jóvenes.
La fiesta, que se clausuró con un concierto ofrecido por el grupo Es Bastió de s'Illa, sirvió también para agradecer el papel de las instituciones, empresas y particulares que colaboran desinteresadamente durante todo el año en la promoción y la atención de los donantes de sangre.