Los estudiantes de Educación Secundaria de la Isla iniciaron la semana pasada, con un importante seguimiento, una huelga que continúa hoy en el caso de Ciutadella (en el resto de los municipios no hay clase), tanto en la enseñanza pública como en la concertada. Tres cuestiones empujan a los alumnos a dejar de acudir a las clases: los recortes acumulados, la aplicación de la LOMCE y la reforma universitaria.
Adra Castilla, portavoz del colectivo estudiantil 20 de juny, es concisa y clara en el primer punto: «Hay que volver al punto de partida anterior a los recortes». Esta asociación ha actuado como convocante de la huelga. Castilla cree que la participación de momento ha sido buena, a pesar de condicionantes como la coincidencia con los exámenes concentrados, que han evitado que se llevaran a cabo manifestaciones.
En cuanto a la LOMCE, los estudiantes son críticos con las reválidas, que restan confianza en los docentes y presuponen una supuesta homologación de contenidos en las materias que ni existe ni se recomienda. Castilla lamenta que la religión coja peso, que los alumnos con dificultades pierdan atención y que la FP, que tanto costó prestigiar, baje varios peldaños en su consideración. En resumen, «un retroceso brutal».
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