La Asociación Ruta Europea del Queso (AREQ) inició ayer en Maó su primer encuentro tras su constitución. Son unas jornadas de trabajo en las que participan miembros de las regiones o municipios que constituyen la entidad, con la finalidad de trazar las líneas de acción para convertirse en una «herramienta» válida para trabajar en el campo de la promoción turística y de producto a partir de un sector como es el del queso.
Desde ayer y durante el fin de semana, los alcaldes y algunos concejales de las localidades de Idiazábal (Guipúzcoa), Manzanares (Ciudad Real), Morales del Vino (Zamora), Casar de Cáceres (Cáceres), Ripoll (Girona), Cabrales (Asturias) y Maó, asisten a este encuentro en el que, según la alcaldesa anfitriona, Águeda Reynés, «se sentarán los pilares de la asociación y las estrategias a seguir». Y es que para el presidente de la AREQ, el primer edil de Idiazábal, Ioritz Imaz, «el objetivo no es la asociación, sino que sea una herramienta para trabajar la promoción turística en nuestros pueblos y comarcas, para promocionar conjuntamente tanto el sector (del queso) como las regiones».
Las primeras acciones que pretenden incorporarse es la asistencia a ferias bajo un stand común, para dar a conocer los quesos de cada uno de los municipios. Así, las primeras citas serán la Feria Nacional del Queso, en Manzanares, la Fira de les 40 Hores de Ripoll, i GastroMô, en Maó. La idea es que los miembros de la asociación tengan cada vez más presencia en estos eventos.
Además, tiene también entre sus objetivos ampliar el número de municipios miembros. Para ello se trabajará no solo en el ámbito nacional, sino también europeo. De hecho, según apuntó Imaz, esta asociación ha despertado interés en otros países. Quizá por eso Francia será el invitado de la Feria Nacional del Queso del último fin de semana de marzo.