El Consell alegará contra la negativa de la Secretaría de Estado de Turismo a prorrogar el plazo para el proyecto de las cuevas de Cala Blanca, lo que significaría la pérdida de la aportación estatal, que asciende 291.134 euros, en la cuarta anualidad del Plan de Dinamización del Producto Turístico (PDPT). Así lo anunció ayer la consellera de Turismo en funciones, Salomé Cabrera, al término de la reunión de la comisión del PDPT, que se celebró en el Consell y contó con representantes de las administraciones y entidades implicadas: el Gobierno central, la Comunidad Autónoma, el Consell y la patronal hotelera ASHOME.
En su alegación el gobierno insular incidirá en el hecho de que el retraso que lleva el proyecto «no se debe a la dejación sino a que es materialmente imposible ir más deprisa con los plazos que exige la Administración en los procedimientos».
Se refería así Cabrera al principal escollo para que las obras de acondicionamiento de las cuevas empezaran en octubre de 2014, la modificación pendiente del Plan General de Ciutadella en el que debe quedar recogida la existencia de este espacio subterráneo.
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