La sociedad municipal Promocions Urbanístiques de Maó (PUM) deberá iniciar el 1 de diciembre de este año, dentro de apenas cuatro meses, un proceso de disolución para dejar de existir con la entrada del nuevo ejercicio 2016. El motivo es que se han cerrado dos ejercicios consecutivos con desequilibrio financiero en las cuentas del ente, lo que es causa de desaparición en virtud del contenido de la Ley de Racionalización y Sostenibilidad de la Administración Local, conocida como la Ley Montoro.
Un informe del interventor municipal relativo a la liquidación presupuestaria de 2014, con fecha de 18 de junio y que hoy será sometido a consideración del pleno, advierte de esta circunstancia al nuevo equipo de gobierno. De hecho, los concejales de Ara Maó y PSOE ya se han puesto en marcha para intentar revertir la situación, para lo que han solicitado informes tanto internos como externos.
El objetivo es buscar una solución 'in extremis', ya que el tiempo apremia y no parece nada sencillo. La salvación del PUM pasaría por cambiar su función, otorgarle más atribuciones e incrementar sus ingresos. Otra opción es crear otra entidad derivada de naturaleza distinta.