Alba, la Asociación de Mujeres Afectadas de Cáncer de Mama de Menorca, ha celebrado este lunes el Día Internacional Contra el Cáncer de Mama en el Hospital Mateu Orfila de Maó, con la presencia de la consellera insular de Bienestar Social, Maria Cabrisas, y el director gerente del centro hospitalario, Antoni Gómez Arbona. Un acto en el que se reivindicó la equidad de oportunidades para acceder a los tratamientos, para que residir en una u otra autonomía no implique diferencias a la hora de combatir la enfermedad.
Éste es uno de los principales mensajes que lanzó la Federación Española de Cáncer de Mama (FECMA), a la cual pertenecen Alba y otras cuarenta asociaciones de todo el país. Fue a través de su manifiesto, en motivo del Día Internacional del Cáncer de Mama. Un texto en el que la federación reitera su «compromiso con un sistema de salud de gestión pública, que ofrezca una atención integral, personalizada, multidisciplinar y de calidad, de acceso universal y gratuito», y con una «cartera de servicios única y común».
Es así como las asociaciones de afectadas por esta patología «reivindicamos la igualdad», porque «no nos resignamos a que la vida y la salud se contabilicen como un elemento presupuestario».
FECMA sigue apostando por los «programas de detección precoz y mantenemos nuestro objetivo de concienciar a las mujeres e incentivar» su participación en las campañas de detección. Estos colectivos, que recuerdan que «el cáncer de mama afecta a una de cada ocho mujeres», muestran su apoyo hacia «los ensayos clínicos y la participación activa del paciente» e insisten en la «necesidad de invertir en innovación y nuevos conocimientos».