El equipo de gobierno de Ciutadella aprobó en la noche de este jueves, con los votos favorables del PSM, PSOE y Gent per Ciutadella, la modificación del IBI, que implica que los propietarios de inmuebles paguen un 5 por ciento más que en 2011 (antes de la subida del 10% impuesta por Rajoy), aunque un 5 por ciento menos que este año.
El concejal de Hacienda, José López defendió la propuesta, confesando que la intención del equipo de gobierno era en 2016 bajar el 10 por ciento impuesto por el Gobierno. No obstante, la necesidad del Consistorio de contar con estos 582.000 euros para hacer frente a las sentencias y a las «deudas del pasado dejadas por el PP», ha hecho que solo pueda reducirlo al 5 por ciento.
PP y UPCM votaron en contra de la modificación, al considerar que «no hay motivos para no bajarlo el 10 por ciento», temiendo que se haga con el objetivo de «recaudar más para poder gastar más», dijo el concejal popular Joan Benejam. El edil de UPCM, Joan Triay compartió los argumentos del regidor popular, no sin antes recordar la responsabilidad del PP en las sentencias y la deuda heredada en el Ayuntamiento, así como los tres intentos del PP de subir el IBI otro 10 por ciento en el pasado mandato.
La oposición argumentó, a partir de un primer borrador de los presupuestos facilitado por el equipo de gobierno (que asciende a 31,1 millones), que el tripartito prevé incrementar diversas partidas, entre ellas la de mantenimiento de servicios (con 408.000 euros más) y la de personal (+193.000 euros), por lo que creen que podría haber margen para lograr una bajada del 10 por ciento.
La alcaldesa Joana Gomila recordó que el documento de los presupuestos es un primer borrador, que tiene que ser revisado por los servicios económicos y adelantó que muchas de las partidas citadas por la oposición ya han sido nuevamente ajustadas. Insistió que «no hay margen de maniobra» y emplazó al PP a compartir «su varita mágica» para poder cuadrar los presupuestos asumiendo «los millones y millones de euros que Ciutadella ha perdido por culpa del PP».
Gomila acusó a la oposición de «incoherencia» por haber subido el IBI en 2008 alegando entonces que era una «situación excepcional» y que se hacía «para paliar los errores del pasado» y para hacer nuevas inversiones, que la mayoría no se ejecutaron. La alcaldesa les recriminó que ahora, cuando «la situación es más grave, y que no se hace para hacer inversiones innecesarias, voten en contra», cuando en 2008 el PP aprobó la subida y UPCM s e abstuvo.
Apoyo a las entidades
Donde si hubo acuerdo unánime fue en la modificación del IBI para incorporar una bonificación para los inmuebles de entidades sociales, culturales y deportivas que sean consideradas de «especial interés» para el municipio de Ciutadella.