La atención social y la reactivación económica son los dos «ejes irrenunciables» de los presupuestos del cambio político en el Ayuntamiento de Maó, según subrayó este jueves la alcaldesa, Conxa Juanola, durante la presentación de las cuentas municipales, que se llevarán a debate plenario este mes de diciembre.
El gobierno de Ara Maó y PSOE consigna, de los 35,2 millones de euros presupuestados como gastos, 10,15 millones de euros para políticas de urgencia social y cohesión, entre las que se incluye un incremento de la partida de ayudas a familias desfavorecidas, que pasa de 173.944 euros en 2015 a los 323.000 euros previstos para el próximo ejercicio. Dicha partida abarca medidas como un programa de nutrición infantil, ayudas a la escolarización de 0 a 3 años y la ampliación del horario del comedor social. Los capítulos de atención social directa y de atención a través de ayudas a terceros suponen un gasto total de 2,85 millones de euros, medio millón más que en 2015.
El Ayuntamiento de Maó aprobará un presupuesto para 2016 que alcanza los 37,7 millones de euros de ingresos pero en la práctica dispondrá para gestionar y aplicar sus políticas de 35,2 millones porque la diferencia, 2.525.240 euros, solo se contabiliza en el papel. La cifra corresponde a la financiación que por ley estatal debería llegar para cubrir servicios sociales del Govern balear, la administración competente, pero el área de Hacienda no confía en que esa partida llegue a hacerse efectiva. Así lo explicó el teniente de alcaldía de Hacienda, Jordi Tutzó, durante la presentación del proyecto presupuestario junto a la alcaldesa, el teniente de alcaldía de Promoción Económica, Vicenç Tur, y otros miembros del equipo de gobierno.
El motivo de ese superávit ficticio y de que esos 2,5 millones de euros queden "congelados", explicó Tutzó, es que aunque la Ley 27/2013 de Racionalización y Sostenibilidad de la Administración Local, la denominada 'ley Montoro', contempla esa asunción de competencias por el Govern -en el caso de Maó por ejemplo el geriátrico, el propio Ministerio de Hacienda comunicó en noviembre a los ayuntamientos que la reforma local queda supeditada a la aplicación de un nuevo sistema de financiación autónomico.
Ante esta situación el equipo de gobierno de Maó elabora "unos presupuestos prudentes y transparentes", recalcó la alcaldesa, Conxa Juanola, quien también destacó que el proyecto, que ayer se entregó a la oposición en la Comisión de Hacienda, cuenta con el informe favorable de Intervención, algo que no sucedió con el presupuesto de 2015 «y eso es fundamental», afirmó.
Dinamización
Por su parte Vicenç Tur, responsable de Promoción Económica, destacó que el 41 por ciento del presupuesto va dirigido a «dinamizar la economía, con un gasto total de 14,45 millones de euros que está vinculado a programas y actuaciones de tipo económico, como el apoyo a la formación ocupacional, al comercio de proximidad, a la rehabilitación de vivienda o la renovación de infraestructuras.