El debate era nuevo, pero daba la sensación de haberse celebrado en otras ocasiones, en las elecciones de hace cuatro y ocho años, en las locales de mayo, en el Parlament balear cada semana. La financiación autonómica y el transporte áereo -además de comentarios sobre la corrupción, imprescindible en estos escenarios- volvieron a ser los temas concretos de las intervenciones y de una de las tres preguntas del público, lo cual indica que tales problemas persisten y que se exponen sin propuestas ni capacidad de solución, aunque todos se manifiestan sobre el mismo.
Los candidatos al Senado también se expresaron sobre ello anoche en el Ateneo, Bonmatí admite que ha de ser un acuerdo entre el Estado y la comunidad autónoma; Pons Vila arguye que hay OSP interislas y con Madrid y que es un problema que sufren todas las islas de Mediterráneo; Arguimbau señala que la planificación no puede estar en manos privadas sino que las condiciones ha de ponerlas la Administración y Mora, que no es partidaria de la redicha tarifa plana sino de una tarifa reducida, entiende que imponer las condiciones es un brindis al sol, puede pasar como en Cerdeña que por algo así se quedó sin vuelos. Mercadal, por su parte, apela al compromiso del PSOE con la tarifa plana, que es importante además para desestacionalizar el turismo, opinión que comparte Bordoy.
Los candidatos se habían definido antes en torno al papel de la cámara legislativa y territorial a la que concurren. Bonmatí es tajante al proponer su partido la eliminación a cambio de una cámara territorial de verdad, Podemos recueda que nos cuesta 52 millones de euros, propone reformarlo al estilo alemán y la revisión de sueldos. Mercadal dice que el PSOE propone reformar no el Senado sino el Estado y Arguimbau asegura que mientras esté ha de cumplir su función de cámara territorial. Pons Vila, con más experiencia de causa y ante las alusiones de esterilidad de la institución, recuerda que quien quiere trabajar lo hace y que el balance de esta legislatura muestra que se ha trabajado en materias que afectan directamente a Menorca como la ley de medio ambiente.
Respecto a lo que cada uno de ellos hará en el Senado, si alcanza la plaza. Mora une su suerte al programa del partido, lucha contra la corrupción y más transparencia, «que la gente entre en las instituciones, no basta confiar en los representantes». Bordoy, que se había definido en su primera intervención como simpatizante socialista, apela «a la defensa de un programa realista por la Isla».
La candidata socialista Gràcia Mercadal invita a reflexionar sobre el partido que ha traído la modernidad y recuerda el compromiso de Pedro Sánchez con los dos temas estrella del ebate político de las Islas, la financiación autonómica y el transporte aéreo. Arguimbau expone su condición de representar una opción sin ataduras, que iría al gurpo mixto y votará en libertad. Bonmatí reitera la necesidad de cambio para regenerar la vida política y encauzar los grandes problemas del país.
Pons Vila promete mantener continuidad de trabajo, «que durante cuatro años he realizado en circunstancias difíciles».