El Ayuntamiento de Sant Lluís se ha puesto manos a la obra para hacer frente a la temprana aparición de la procesionaria. La semana pasada se dirigió a la delegación del Govern para solicitar permiso para poder usar escopetas y disparar a los bolsones. En este caso, la actuación la llevarán a cabo los dos operarios de la brigada municipal que disponen de permiso de armas en diversas zonas municipales y pinares. Esta técnica debe restringirse a casos en los que la altura del arbolado no permita el empleo de otros métodos. El Consistorio tiene previsto que los trabajos se realicen la semana del 22 al 26 de febrero.
El viernes pasado fue el turno de los operarios de la brigada municipal del Ayuntamiento de Ciutadella, que actuaron en la plaza de Es Pins y en la zona de Sa Farola, dos de los lugares donde se ha detectado una mayor presencia de esta plaga silenciosa que lleva años perjudicando a los pinos de la Isla. Las elevadas temperaturas del mes de enero han propiciado la aparición de la plaga antes de los previsto.
A ello, cabe añadir que durante todo el ejercicio pasado, el Govern no llevó a cabo ninguna campaña de fumigación aérea, lo que puede provocar que la plaga sea mayor este año.