El reciente dragado del puerto de Maó no ha sido suficiente para el «Mein Schiff 1», de la compañía Tui Cruises. Los 8,30 metros de calado del crucero, unidos a sus 264 metros de eslora, no garantizan la óptima maniobrabilidad del barco en la zona de los muelles comerciales, por lo que Autoridad Portuaria de Balears no ha autorizado su atraque. Los estudios realizados por el ente gestor del puerto de Maó indican que en algún punto podría «tocar fondo».
Autoridad Portuaria informa de que ha ofrecido a Tui Cruises la posibilidad de fondear fuera de los muelles comerciales y que en principio la compañía lo acepta, por lo que las dos escalas de 2016 se mantienen (3 y 13 de octubre). Indica que siempre se pone la seguridad por delante, ya que un incidente sería más perjudicial que la pérdida puntual de escalas.
La situación no es nueva. En 2013 el «Saga Saphire» y sus 8,4 metros de calado tuvieron que fondear en las inmediaciones de Cala Figuera durante sus escalas. Luego, el 25 de abril de 2014, con el dragado ya avanzado, sí pudo atracar en los muelles. La diferencia entre uno y otro es que el «Mein Schiff 1» tiene 65 metros más de eslora, lo que afecta a la maniobrabilidad.
El año pasado se anunció la presencia del «Mein Schiff 1» en la programación de 2016. Se dijo que con sus 264 metros de eslora y casi 2.000 pasajeros iba a ser el más grande que jamás ha atracado en el puerto, aunque luego lo superó en las previsiones el «MSC Armonia» que por primera vez traerá en abril hasta Maó sus 'nuevos' 275 metros de eslora y 2.850 camas.