La sustitución de las rotondas de doble nivel promovidas por el PP por los carriles centrales de espera introducidos ahora por la izquierda para canalizar el tráfico en estas mismas intersecciones reduce el impacto de las actuaciones previstas en la general, pero obliga también a incorporar nudos viales próximos en los que poder efectuar un cambio de sentido.
Así se ha proyectado al menos en dos tramos de la carretera entre Ciutadella y Ferreries donde inicialmente se proponía regular el tráfico mediante rotondas. Es el caso de la suprimida frente a la cantera de Son Sintes (kilómetro 36,8), que ha llevado a ajustar el enlace con Son Sivineta (38,5) para poder realizar allí el cambio de sentido. Eso implica que los conductores que se incorporen a la vía para salir hacia Maó deberán recorrer antes 1,7 kilómetros en dirección a Ciutadella para cambiar su sentido de circulación. Otro tanto ocurrirá con los coches que salgan de la ITV (42,2), que deberán circular un kilómetro hacia Maó y llegar hasta el carril central que se habilite frente a Impresa (41,2) para poder entrar en Ciutadella.
«La mejora de la carretera se plantea así desde un principio. Están prohibidos los giros a la izquierda y solo se puede cambiar de sentido en los tramos adaptados para este fin», precisó este martes el director insular, Joan Sales, quien anuncia una solución similar para suplir la función de la rotonda que se suprimirá a la altura de Biniai, entre Maó y Alaior. El Consell deberá preveer una zona en la que cambiar de sentido en los 3,5 kilómetros existentes entre Rafal Rubí y el cruce con el Aeropuerto. «Lo ideal es que puedas cambiar cada dos kilómetros, pero en este tramo la distancia es excesiva».
El alcalde de Ferreries, Josep Carreres, cree que «este problema es pecata minuta para una propuesta mucho más equilibrada que la del PP y que ya quedó recortada en mayo. Si, encima, ahora se le introducen nuevos matices medioambientales, económicos y de seguridad, mucho mejor».