La Conselleria de Educación ha propuesto al CEIP Francesc d'Albranca de Es Migjorn Gran la supresión de tres aulas para el curso que viene. Sostiene que hay pocos alumnos por aula, de manera que se pueden optimizar los recursos disponibles.
La propuesta es que se unifiquen las clases de diferentes cursos para que la ratio se incremente, ya que actualmente se encuentra alrededor de 11 alumnos por aula. La oferta inicial es fusionar P3 y P4, tercero y cuarto de Primaria y quinto y sexto. Una decisión que afectaría a unos setena de los más de cien alumnos matriculados actualmente en el centro, que verían como sus aulas duplicarían la capacidad.
Para el delegado de Educación en Menorca, Joan Marquès, el planteamiento pretende «atender mejor las necesidades educativas de la escuela». Explica que para elaborar la propuesta del próximo año, la Conselleria ha tenido en cuenta el número de alumnos que, según el padrón, tendrán edad para escolarizarse a partir de setiembre, también los posibles repetidores y los alumnos nuevos procedentes de otros municipios o localidades. Con estos datos, las cifras resultantes siguen siendo muy bajas, por lo que sugieren tomar esta medida.
Marquès, sin embargo, asegura que se tendrán en cuenta las alegaciones presentadas por la escuela. Y es que la noticia no ha gustado en el «Francesc d'Albranca». Tras conocer la intención de la Conselleria, se convocó el Consell Escolar de manera extraordinaria, donde se aprobó un documento, ya remitido a la administración autonómica, en el que maestros, Ampa y Ayuntamiento rechazan la propuesta y exponen sus alegaciones. Entre ellas, critican que se quiera fusionar dos cursos que pertenecen a ciclos diferentes, como es el caso de tercer y cuarto de Primaria. Sostienen también que históricamente el centro ha tenido pocos alumnos debido a que se encuentra en un municipio pequeño, aunque las matriculaciones se han mantenido estables durante los últimos años.
Proyecto
Además, defienden que son la escuela de referencia en Es Migjorn Gran y que su proyecto educativo está adaptado a la realidad actual del centro, por lo que una modificación de este tipo afectaría también a la pedagogía que imparten. «Tenemos una manera de trabajar innovadora, sin libros de texto, con talleres de arte y la creación de un huerto entre los alumnos», explican desde el centro. Por otro lado, el equipo directivo ha presentado este año un proyecto de dirección para implantar en los próximos años basado en el actual funcionamiento del centro.
Educación está estudiando las enmiendas presentadas y a partir del 9 de mayo dará a conocer la resolución final. Marquès insiste en que se trata de una propuesta inicial y que las consideraciones del centro serán escuchadas y tenidas muy en cuenta.