«Si existen fundamentos jurídicos para decir que el impuesto se ha formalizado mal, deprisa y corriendo, la junta de gobierno de Ashome estudiará adherirse al recurso presentado por los hoteleros de Mallorca», declaró ayer el presidente de la patronal menorquina, Luis Casals. Los empresarios están molestos porque, aseguran, la tributación no está resultando como se les dijo inicialmente. La mayoría de los hoteleros presentan su declaración por módulos y en el primer pago a cuenta, mañana día 20 de septiembre, se les informó de que abonarían un 40 por ciento de lo recaudado y el resto, en un resumen anual en enero. «Ahora resulta que como el impuesto se empezó a cobrar el 1 de julio y no se han aplicado los índices correctores de desestacionalización estamos avanzando entre el 90 y el 95 por ciento de lo recaudado», explicó Casals, «nos sentimos engañados, hacemos de banco del Govern», aseguró.
Ante esta situación, un día después de que la Federación Hotelera de Mallorca anunciara que lleva el impuesto turístico ante los tribunales, los empresarios menorquines no descartan sumarse a esta vía judicial. «Cuando el tribunal decida si admite o no el recurso contra el reglamento del impuesto, estudiaremos si presentamos una demanda, seguramente lo haríamos en conjunto con otras entidades», puntualizó Casals.
Por su parte, el portavoz parlamentario de Més, David Abril, calificó ayer el recurso de los hoteleros mallorquines de «guerra política con el Govern» ya que «los turistas han asumido plenamente el impuesto turístico porque es lo normal que te encuentras en cualquier destino».