El presbítero menorquín Rafel Portella Moll ha fallecido de forma repentina durante esta pasada noche, a la edad de 54 años.
El cuerpo sin vida del sacerdote ha sido hallado en la mañana de este lunes en la rectoría de Es Migjorn Gran, al constatar que no acudía a oficiar la Eucaristía.
Hace pocos días había tomado posesión de la parroquia de Es Migjorn Gran, su población natal. La noticia de su inesperado fallecimiento ha causado gran consternación.
Rafel Portella, tras recibir la ordenación sacerdotal, desempeñó su ministerio pastoral en Menorca, donde ejerció distintas funciones y responsabilidades. Ha sido párroco de Sant Antoni Maria Claret de Ciutadella, Sant Lluís y Sant Antoni de Maó, consiliario del Centro Catequístico Sant Miquel y secretario general de Caritas Menorca.
Desde el 2003, tras la muerte de Miquel Anglada Gelabert, y hasta el 2011, cuando fue nombrado Gerard Villalonga, ejerció las funciones de vicario general y moderador de la Curia Diocesana.
El administrador diocesano, Gerard Villalonga, ha manifestado el impacto que ha provocado el repentino fallecimiento de Rafel Portella "hermano en el presbiterio con el que todo el clero diocesano se sentía muy unido" y ha destacado su "celo pastoral, humildad, preparación y el esfuerzo con que ejerció todas las funciones y responsabilidades que le fueron encomendadas".
La diócesis organizará con la familia de Rafel Portella la misa exequial, que se oficiará mañana en la iglesia parroquial de Es Migjorn Gran.